La defensa de los derechos de las mujeres y las niñas y la promoción de la igualdad de género son valores fundamentales que han formado parte de la esencia del CECI desde su fundación
Tiene en cuenta el vínculo entre diversas formas de discriminación (por razón de género, raza, orientación sexual, discapacidad, etc.), que a veces se entrecruzan y refuerzan mutuamente.
Un enfoque que nos permite trabajar con hombres y niños como aliados, con base en el papel positivo que pueden desempeñar en la lucha por la igualdad de género. Esto implica reconocer las diferentes identidades masculinas, los estereotipos y las dinámicas de participación, así como valorar las aportaciones de hombres y niños que ven en el feminismo un instrumento positivo para el progreso social.
han sido víctimas de violencia física y/o sexual al menos una vez en su vida en el mundo (ONU Mujeres)
en el planeta tienen una mujer como jefa de Estado (ONU Mujeres)
mueren cada día por causas prevenibles relacionadas con el embarazo y el parto en el mundo (OMS)
En todo el mundo, las mujeres y niñas se enfrentan a numerosos desafíos para hacer realidad todos sus derechos: desigualdades sistémicas, discriminación, estereotipos, carga de trabajo no reconocida, violencia sexual y de género persistente, entre otros. Hoy en día, las mujeres elaboran la mayoría de los productos agrícolas, pero rara vez controlan los recursos que producen. Los sistemas patriarcales en los que suelen desenvolverse también limitan sus derechos de propiedad, así como su acceso y participación en la toma de decisiones y la plena igualdad con los hombres.
Reducir las limitaciones y los obstáculos para el acceso de las mujeres y las niñas a los servicios esenciales (educación, salud, justicia) apropiados y de calidad;
Apoyar una respuesta coordinada y eficaz para prevenir y combatir la violencia de género y promover masculinidades positivas;
Apoyar los movimientos de mujeres (organizaciones y redes de la sociedad civil) y la acción colectiva para promover los derechos de las mujeres y la igualdad de género, y amplificar su voz y liderazgo;
Apoyar los esfuerzos que promuevan los derechos de propiedad de las mujeres (bienes raíces y no raíces).
El objetivo de estas acciones es permitir que las mujeres y niñas tengan acceso a servicios esenciales adaptados y sensibles a los problemas a los que se enfrentan, vivan una vida libre de violencia, se organicen y participen en la toma de decisiones y tengan control sobre los recursos que permiten su autodeterminación. De este modo, pueden reivindicar sus derechos en todos los niveles y en todas las circunstancias, en un entorno solidario e integrador. Así, los derechos de las mujeres y las niñas se protegerán, respetarán y cumplirán.
1860 organizaciones que representan a más de un millón de mujeres se han unido en una coalición con el apoyo del CECI en Burundi, la República Democrática del Congo y Ruanda. Su trabajo ha llevado a la adopción de la Declaración de Kampala, apoyando así la implementación de planes nacionales destinados a reducir la violencia sexual y basada en el género.