Historia de éxito
Por Tessa, voluntaria de apoyo a la incidencia feminista en Cochabamba, Bolivia
En Cochabamba (Bolivia), grupos de mujeres se reúnen cada mes para denunciar la violencia, defender sus derechos y hacer oír su voz en espacios públicos. Trabajando junto al Instituto de Formación Femenina Integral (IFFI), una organización feminista, Tessa ha tenido el privilegio de apoyar estas acciones y ser testigo de su poder transformador. Como voluntaria de incidencia política con un enfoque transformador en género, Tessa contribuyó a una misión aparentemente sencilla pero profundamente política: fortalecer los derechos de las mujeres en un contexto donde estos continúan siendo vulnerados con demasiada frecuencia.
Defensa del femenino plural
IFFI, la organización socia donde trabajó Tessa, lleva más de 40 años apoyando a las mujeres de Cochabamba, ya sean jóvenes, madres, jefas de hogar o sobrevivientes de violencia. Sus proyectos abarcan la formación política, los derechos laborales, el empoderamiento económico y la participación ciudadana.
En este contexto, el enfoque de género no es sólo un concepto: guía cada acción, cada taller, cada documento. «Todo lo que hacemos está pensado desde una perspectiva feminista», explica Tessa. Esto implica cuestionar las normas sociales, documentar las desigualdades estructurales y formar a las mujeres en el conocimiento de sus derechos para que puedan ejercerlos, tanto en el hogar como en el ámbito público. Reclamarlos, tanto en casa como en la esfera pública.
Formar, escuchar, ampliar
Tessa contribuyó a la elaboración de material pedagógico utilizado en muchos de los talleres de formación: trípticos, cartillas y folletos prácticos que las participantes pueden llevar consigo. "Son herramientas concretas que ellas pueden releer, compartir y utilizar como palanca de empoderamiento. Muchas mujeres me contaron cómo este material les ha ayudado a comprender mejor sus derechos y a conversar sobre su situación con otras personas.”
Sin embargo, lo que más la marcó fueron los intercambios humanos. Durante un taller sobre los distintos tipos de violencia -la ley boliviana reconoce 16 formas diferentes de violencia- surgieron relatos profundamente conmovedores. «Una mujer me contó que había intentado denunciar la situación de una amiga, pero la policía le respondió: “Es tu marido, tienes que obedecerle". Otra compartió que le llevó años entender que lo que vivía no era normal. Al final, una de ellas me tomó la mano y me dijo: "Gracias. Este mensaje tiene que llegar también a las comunidades rurales". Fue un momento que nunca olvidaré".
Redes para la resistencia
Además de los talleres, Tessa también representó al IFFI en una red local dedicada a combatir la violencia contra las mujeres. Como parte de esta red, cada mes, representantes de diversas organizaciones se reúnen para hacer un balance de su situación, responder a los acontecimientos actuales y coordinar acciones comunes.
"Cuando una mujer es asesinada o agredida públicamente, son estos grupos los que elaboran declaraciones, movilizan a los medios de comunicación y organizan vigilias. No dejan que nada pase desapercibido. Es una defensa arraigada en la realidad, nutrida del trabajo de base y que actúa con rapidez.
Reflexiones sobre la solidaridad
Para Tessa, este mandato ha significado una verdadera inmersión en el trabajo de defensa feminista en un contexto local. Pero también ha sido una oportunidad para reflexionar sobre su posición y su rol. "El enfoque decolonial implica reconocer que mis saberes y herramientas provienen de otro contexto. Aquí he aprendido a escuchar, a trabajar colectivamente y a valorar la experiencia de las mujeres que me rodean".
Próxima a regresar a Bolivia para un segundo mandato, espera ampliar su contribución en la gestión de proyectos y continuar haciendo lo que mejor sabe hacer: escuchar, aprender y acompañar acciones transformadoras.
Para Tessa, el voluntariado no es un paréntesis. Es un compromiso claro, basado en el intercambio y el reconocimiento mutuo. Es una forma de tejer lazos duraderos al servicio de un mundo más justo.
Gracias a nuestros socios financieros y de implementación, sin los cuales este proyecto no sería posible. El programa de cooperación voluntaria del CECI se lleva a cabo en colaboración con el Gobierno de Canadá.