Cooperativas de mujeres productoras de karité

Una contribución financiera del Ministère des Relations internationales de Quebec, nos permitió iniciar un nuevo proyecto de economía social con un enfoque medioambiental en Burkina Faso. La producción de manteca de karité por cooperativas de mujeres ha conocido un desarrollo notable en los últimos años. Sin embargo, este crecimiento plantea nuevos desafíos medioambientales. De hecho esta actividad de producción implica un consumo relativamente importante de leña y agua, y crea residuos vegetales. A baja concentración, estos residuos no son dañinos; sin embargo, a medida que la producción aumenta, las cooperativas de productoras se enfrentan a un nuevo problema, la gestión medioambiental. Además, la presión sobre los recursos naturales (agua y leña) aumenta también de manera crítica para un medioambiente de Sahel. Dado que la mayoría de las nuevas empresas sociales prevén acrecentar su producción para satisfacer el mercado, deben tomarse ciertas medidas a mediano y largo plazo para asegurar la sustentabilidad del desarrollo socioeconómico mediante la elaboración e implementación de métodos de producción más ecológicos.

Es el desafío que intentamos enfrentar con nuestra asociación con una importante empresa social, la UGPPK, una unión de cooperativas que reúne más de 3.000 productoras de karité en Burkina Faso. A partir de tecnologías adaptadas a la producción neutra en carbono, una unidad de producción verde de manteca de karité será creada con varios objetivos: manejo de los recursos naturales, compostaje de los residuos vegetales, reciclaje de las aguas residuales, así como un mayor uso de energía renovable mediante la producción de biogás y de energía solar. La capacitación de las productoras y la optimización ergonómica de la producción, transformación y comercialización forman parte de la iniciativa, a fin de reducir el trabajo laborioso, mejorar la productividad y aumentar la eficiencia energética.

“La venta de manteca de karité nos permite ganar dinero para solucionar los problemas de la familia, la salud, la escolaridad de los niños, los huérfanos, y salir de la pobreza.”

Señora Nan Yago, presidenta de la unión de productoras de karité de Léo en Burkina Faso.