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La erupción del volcán de Fuego ocurrida hace exactamente un mes dejó al menos 300 personas muertas y devastó muchos pueblos enterrádolos bajo metros de ceniza y roca volcánica, el horror de la tragedia recuerda la de Pompeya ocurrida hace dos milenios. Más de 12 800 personas tuvieron que evacuar sus tierras y 3 636 de ellas están viviendo en refugios temporales en condiciones de hacinamiento y falta de higiene, haciendo su vida diaria difícil más allá del trauma que sufren a raíz de la pérdida de parientes cercanos. Más de 20 000 agricultores y productores de la región también se vieron afectados por la ceniza volcánica y han perdido los cultivos, lo que dificulta su acceso a los alimentos básicos, amenazando así la seguridad alimentaria de sus familias.
Para hacer frente a esta situación y ayudar a las víctimas, el CECI pide su generosidad. Desde el primer día, el equipo del CECI-Guatemala ha estado trabajando con entidades gubernamentales y otros actores humanitarios para evaluar las necesidades y garantizar la protección de mujeres y niños en refugios temporales. Gracias a su generosidad, el CECI podrá proporcionar a las familias los artículos de higiene que necesitan, centrándose en las necesidades de las mujeres y las niñas. Su intervención también ayudará a capacitar a líderes jóvenes en la prevención de la violencia y les brindará la oportunidad de seguir una capacitación profesional para encontrar un trabajo o comenzar un pequeño negocio. El CECI también planea apoyar a las familias campesinas para que revitalicen sus cultivos de maíz y frijoles, que forman la base de su dieta, así como para diversificar su producción y reiniciar sus actividades agrícolas.
El CECI cuenta con usted para asegurarse de que todas estas acciones se puedan poner en marcha, en solidaridad con el pueblo de Guatemala.